Dalia y yo

Dalia Ivanoff, de sexto Comunicación del Colegio de la Reconquista, escribió el cuento Dalia y Yo en el que se incluyó ella misma como personaje, a partir del texto Borges y yo, que plantea el tema del doble y el de la identidad.

Dalia y yo

La que se apodera del lápiz a la hora de escribir soy yo. Soy la que desenmascara y destapa todo lo que la otra quiere enterrar. Soy la parte ansiosa que no la deja respirar. La culpable de inundar su cabeza con pensamientos negativos y ahogar su voz cuando quiere contar lo que le pasa. Ella tan alegre, yo tan trágica. No fue su culpa que yo haya aparecido. La escucho y la siento quejarse siempre de su ansiedad, de sus ataques. Me da pena, no es su culpa. Ella es consciente de que cada vez ocupo más y más lugar en su vida. Ella sabe, pero no dice nada. Yo no la dejo. La gente le dice siempre, los escucho, que se tiene que tratar, que le voy a arruinar la vida. Ella sabe, pero no dice nada. Yo no la dejo. Los demás no saben lo que es vivir conmigo en su cabeza. Un parásito que no la deja tranquila, que no la deja disfrutar. Un parásito que hace que viva con miedo, que vea lo oscuro en la luz, pensando siempre en el futuro mientras que el presente se le escapa de sus manos. Perdón, nuestras manos. No me conocen, soy el lado vacío, el lado peligroso, desconocido y sombrío de la persona. No saben lo que es tener una mano pintándote la roja alma de un negro puro. Vivir con una guerra constante entre dos fuerzas completamente distintas. En la mayoría gana la que ensucia el alma: Yo. Ella lucha, pero no es fácil. Solo espera aguantar lo suficiente para que no me apodere de ella. Espera que la gente entienda que en su cabeza hay un intruso que ella no controla. Sabe que vine para quedarme. Ella sabe, pero no dice nada. Yo no la dejo.

 

Escrito por Dalia Ivanoff, 6to Comunicación